Una cultura empresarial moderna debe atender la diversidad de ritmos. «Los árabes, por ejemplo, tienen otros tiempos. A veces no dan una respuesta inmediata y la otra parte se precipita. Pensamos que es una pérdida de tiempo tomarse tres o cuatro cafés, pero en otras culturas se ve necesario para analizar qué persona se tiene enfrente». (Celia Anca en El País)