No he empezado a leerlo y que todavía tenga el libro conmigo es casi como un milagro.
Después de que mo regalaran me lo dejé a lo largo de la tarde por dos veces en dos bares distintos.
Iba sobrio pero estresado. Las personas que estuvieron conmigo a lo largo de la tarde pueden dar fe.
El título me resulta terriblemente sugerente por lo que tiene de unir lo inalcanzable con lo táctil que puede ser lo más cercano o porque quizás, y escribo sin leerlo, nos esté queriendo decir que detrás de una caricia se encuentre lo más profundo que podamos dar y que nos den.
Caerá este fin de semana.
Gioconda Belli, El infinito en la palma de la mano. Seix Barral.
Para ver el mundo en un grano de arena
Y el cielo en una flor silvestre
Guarda el infinito en la palma de tu mano
Y la eternidad en una hora
W.Blake