Empiezo a atisbar que nada de lo que es importante e inmutable ocurre por casualidad, y también que en el interior de todos nosotros, los hombres y las mujeres, en lo más hondo, hay una mezcla de sentimientos y deseos, de disfraces y papeles, y que hay momentos en que la vida juega con nosotros y tergiversa ligeramente lo que creíamos definitivo e inmutable’ (Márai, S.; La amante de Bolzano, Salamandra, pag. 257)
… salvo la muerte.
Muy bello mensaje…
Felices fiestas!!!