
Delicioso el librito de Alberto Manguel Bibliotecas editado con motivo de la apertura de la Biblioteca general y la Filmoteca de Navarra.
Una erudita reflexión sobre la biblioteca como espacio, forma e imaginación y una propuesta de Biblioteca ideal ocupan las 96 páginas del libro.
Me interesa resaltar por un lado la reflexión que hace Manguel en torno al espacio conversacional y que me recuerda al ‘constuir y descubrir‘ de Wagensber.
Dice:
En mi jardín, al otro lado de las ventanas de mi biblioteca, hay dos grandes sóforas. Durante el verano, cuando nos visitan amigos, nos sentamos y hablamos bajo ellas, a veces durante el día, pero generalmente por la noche. Dentro de la biblioteca, mis libros distraen de la conversación y nos sentimos inclinados al silencio. Pero fuera, bajo las estrellas, la charla se hace más desinhibida, más variada, y, curiosamente, más estimulante. El hecho de estar sentados a oscuras en el exterior parece conducir a una conversación más libre. La oscuridad invita a hablar.
Me trae recuerdos de mis últimas conversaciones en Castellón y de otras anteriores.
Recojo también algunas notas de Manguel sobre la Biblioteca ideal.
– Está destinada a un lector en particular. Cada lector debe sentir que él es el elegido.
– Es virtual y material a la vez. Permite el uso de toda tecnología, todo el contenedor, toda manifestación de un texto.
– Es un centro de lectura en el sentido más amplio posible.
– Permite a todo lector acceso a los anaqueles. Un lector debe tener la libertad de tener encuentros fortuitos.
– Organiza sin poner etiquetas.
– Es a la vez recluida y pública, íntima y abierta a los encuentros, dedicada a la meditación y también al diálogo, reservada y generosa, erudita y llena de preguntas, a la vez ansiosa por conservar todo lo que ya contiene y con la esperanza de tener lo que todavía no ha leído.
– La biblioteca ideal simboliza todo lo que representa una sociedad. Una sociedad civilizada depende de sus bibliotecas para saber qué es, puesto que las bibliotecas son la memoria de la sociedad.
– La biblioteca ideal (como toda biblioteca) contiene al menos una frase escrita exclusivamente para ti.