Pasado ya el bullicio festivo, ayer se paseaba de cine por el Casco Viejo bilbaino. Y, casi sin darnos cuenta cuando deambulaba por Jardines me encontré con Charamel gozotegia.
Quizás quienes hemos andado vagando como almas en pena desde el cierre de El obrador de Jon, ¿verdad Blanca Mata? encontremos aquí un nuevo espacio espacio para el ‘dulce estar sosegado’.
La cabeza visible de este nuevo proyecto es Nagore Ramos Ipiña que al final ha podido aterrizar en lo que al parecer el cuerpo le pedía: la repostería. Ha pasado además por las ‘manos’ del gran Paco Torreblanca.
Ayer probé una deliciosa tarta tatín de manzana y unas pastas finas, finas y ricas ricas en un ambiente y un local agradable y que invita a quedarse y conversar.
¡Ojalá les vaya bien y podamos disfrutar de dulces fines de semana y de dulces momentos a lo largo de toda la semana!
Y tanto! qué maravilla era el obrador de Jon!!!!! en dulce adoraba aquel brownie terciopelo y el bizcocho de almendra y mandarina (¡nadie más hacía algo así!) y en salado moría de amor por la empanada de zorza!!!! Jon, vuelve pronto!!!! 🙂
A mí tb me gustaba mucho El Obrador de Jon
Que cosas tan ricas y que gente ya maja!!
Animo chicos!!
Muchas gracias por la reseña, conozco el local pero pasaba de largo. Yo que soy muy fan de la Tatín…jajaja… Ya te contaré!!!
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