Librerías ¿están todas las que son y son todas las que están? En torno al Mapa de librerías. 2

La pregunta del millón es: si decimos, en el propio Mapa, que tenemos 1.364 librerías sin información ¿con qué criterio hemos justificado la introducción de las mismas en el censo de librerías?

Todos los medios de comunicación que han abierto con titulares sobre el crecimiento o decrecimiento de las librerías en España, deberían haber puesto a continuación una nota aclaratoria sobre de qué librerías en concreto se está hablando ya que el Mapa de librerías, como se aclara en el propio informe, no habla de todas las librerías.

Deja fuera con claridad todo lo relacionado, en lo que hace referencia al soporte, con el comercio al por menor de libros antiguos o de segunda mano y, en lo que hace al tamaño y fin empresarial, a las grandes superficies y grandes cadenas.

Es conocido el peso cada vez más relevante y organizado que va tomando la venta de segunda mano. Fenómenos como, por ejemplo, Re-Read o Tik-books deben ser tenidos en cuenta y quizás no debamos olvidar que en Francia, por ejemplo, muchas librerías de nuevo trabajan también, no el libro de saldo, sino el de segunda mano.

Hay, por lo tanto un número no despreciable de librerías, que van adquiiriendo un peso y creciendo en número que quedan fuera del estudio.

Sí se mantienen en el mismo las que se denominan Librerías pequeñas-medianas y Librerías muy pequeñas, de las que se nos dice que son:

– Librerías pequeñas-medianas: con una facturación en libros entre 30.000€ y 90.000€ (más del 50% de ventas en libros sobre el total de facturación ).
– Librerías muy pequeñas : con menos de 30.000€ de facturación en libros
(más del 50% de ventas en libros sobre el total de facturación).
Centraré mi reflexión sobre las denominadas ‘muy pequeñas’ cuya facturación máxima, tal y como está propuesto podría llegar a 60.000€ de facturación que, seamos claros, lo sitúa en el terreno de la inviabilidad.
En una situación semejante y siendo generosos se situarían las librerías pequeñas-medianas cuya facturación en libros fuera de un máximo de 50.000€ para, siendo esta el 50%, una cifra total de 100.000.
Para justificar esto vuelvo a traer a colación mi análisis de la servilleta que plantea un suelo de facturación de 150.000 euros.
El problema es que si aplicamos el criterio de sostenibilidad y rentabilidad nos podrían desaparecer del censo casi el 50% de los puntos de venta.

615 que facturan menos de 30.000 y unos cuantos de los 693 de la horquilla de 30.000 a 90.000.

Pero… la pregunta del millón es: si decimos que tenemos 1.364 librerías sin información ¿con qué criterio hemos justificado la introducción de las mismas en el censo de librerías?

Si nos centrásemos sólo en lo que se considera el «Total válido» deberíamos decir que el número de librerías debidamente contrastado ha descendido.

Ahí lo dejo para la reflexión y el debate.

Los Luises

Comer y conversar.

Disfrutar del tiempo y del encuentro con Luis I y Luis II.

Con el I suele ser más habitual que con el II con quien hacía mucho, mucho tiempo que no compartía mesa, mantel y charla. Una agradable sorpresa encontrarle hoy.

Nos ha bastado para alimentarla unos cachelos y un poco de pulpo en El Pulleiro. A partir de ahí y animados por el albariño y el encuentro, la conversación fluye y vamos pasando repaso a los últimos años. Me produce curiosidad que no sorpresa la extrañeza que causan fenómenos como el de la autoedición y autopublicación entre otros sectores de la cultura por la contaminación que suponen sobre el sentido de lo que se hace y propone y de la que algunos quieren hacer bandera.

Hay tiempo para el regalo, el aprecio a la edición cuidada y el pase de notas….

Hablamos de cine, libros, música, teatro, política, anarquismo, liberales, nacionalismo, amor, vejez, estudios, hijos, familia, cómo nos vemos, nos sentimos… y nos vamos dejando llevar… hasta aterrizar dos de los tres en el chocolate que nos trae recuerdos… y nos pone, además tiernos, al ver los niños que nos rodean…

Antes de que acabe el año, más.

Manolo, te están esperando…

Pequeños regalos…

 

La librería tiene mayoritariamente rostro de mujer. En torno al Mapa de librerías. 1

Este domingo vi la película La librería de Isabel Coixet, basada en la novela de Penelope Fitzgerald editada por Impedimenta que lleva el mismo título y que compré y leí en marzo de 2010. Ahora la releeré.

Disfruté de la película y me vine a casa con el run-run de ese reconocimiento que el señor Brundish hace al coraje de la librera.

Digo esto porque ahora que he empezado a mirar con un poco de calma el último Mapa de librerías presentado por CEGAL, del que iré comentando aquellos aspectos y matices que me resulten sugerentes, me ha llamado la atención, aunque no me ha extrañado, la mayor presencia de la mujer en las librerías.

Se dice en el estudio:

Respecto al personal ocupado en librerías (actividad principal según CNAE-2009: 4761), aproximadamente el 45% son los mismos propietarios que trabajan activamente en su librería. El INE los incluye bajo la denominación de personal no remunerado. El resto es personal asalariado, remunerado según el INE. Es mayoritariamente personal fijo en la empresa (79%), siendo un 62% mujeres. En el caso de los trabajadores eventuales (21%), las mujeres representan el 70%. Con respecto a los propietarios no existen diferencias en género, siendo un 52% mujeres frente al 48% de hombres.

Hay por lo tanto, si no entiendo mal, más propietarias mujeres (52%), más trabajadoras fijas mujeres (62%) y más eventuales mujeres (70%).

No me ha parecido que este dato haya sido excesivamente destacado en los medios que se han hecho eco del estudio. Y, a mí me parece que tiene su relevancia.

Pueden reflejar, por invitar a la conversación, el porqué de ese coraje, de muchos proyectos con mimo, con cuidado y pensados para cuidar y atender.

Pienso en algunas libreras que conozco de distintas generaciones. Creo que ese coraje resistente y persiste, pero sin aspavientos, que tienen muchas librerías tiene su toque.

Manuel Vicent escribía este domingo un artículo que titulaba Pequeñas librerías con sabor a miel. También con una mujer librera de protagonista.

Escribe Vicent:

Una librera como esta y tantas otras por el estilo era mi amiga Pepa Ferrando de Denia antes de que su pequeña librería selecta desapareciera llevada por el vendaval de Amazon y la competencia de los grandes espacios. Cuando desde Madrid le pedía algún libro inencontrable, ella poco después me lo mandaba en una caja donde lo acompañaba con algunas hortalizas del tiempo. En cierta ocasión una rara edición del Libre de les meravelles, de Raimundo Llull, viajó a Madrid en compañía de los primeros espárragos y habas de primavera.

A esta estirpe de mujeres derrotadas, pero imbatibles, dedica Isabel Coixet su última película, La librería.

Conviene que recordemos… «mujeres imbatibles»… que son el rostro mayoritario de las librerías de este país y la cara de esos número a veces tan fríos.

Javier Pradera. Itinerario de un editor

Todos los libros tienen su historia y este también. Quizás algún día el editor la cuente…

Mientras tanto lo tenemos ya entre nosotros.

Javier Pradera. Itinerario de un editor.

Editado en la colección Tipos móviles de Trama editorial.

Correspondencia y reflexiones de Javier Pradera cuidadosamente seleccionadas y ordenadas por Jordi Gracia nos permiten hacer un recorrido sobre su vida en torno a los libros y ojear al mismo tiempo lo que pasaba en torno a los mismos, desde los usos y costumbres comerciales hasta la vida política y cultural qye se podía mover en torno a ellos.

Una delicia lúcida que, como señala Miguel Aguilar en el epílogo, ofrece en sus textos «unos análisis asombrosamente aplicables aún hoy».

Este sábado pasado Babelia publicó casi a página entera el texto El exilio de vuelta incluído en el libro.

Ya va acercándose tímidamente a las librerías.

Casi, como escribía él en el año 63, nosotros y muchos libreros podrían decir lo mismo…. Alguna de las citadas todavía sigue dando guerra.

Que se lo pregunten a Pons de Zaragoza.

Los libreros se lamentan de la mala época por la que atraviesa el mercado. Espero que las novedades que correremos en la próxima salgan, sin embargo, normalmente. Las librerías de provincias que nos formulan pedidos son aún escasas –Cervantes, de Salamanca (un pedido de más de 10.000 pesetas; Molist, de La Coruña; Pons, de Zaragoza; Rigal y Maraguat, de Valencia; Comercial Papelera, de Bilbao; Easo e Internacional, de San Sebastián–, pero son varias las librerías que nos han pedido condiciones. Tan pronto como la imprenta nos entregue la tabla de descuentos, haremos una «segunda vuelta» informativa con las firmas más importantes. El servicio de novedades con derecho a devolución será sin duda el caballo de batalla de las negociaciones. (pag. 35)

 

Cuál es el estado de las librerías en España

CEGAL presentó ayer tres estudios, el Mapa de librerías, El sistema de indicadores y de gestión y el Barómetro de ventas que se merecen una lectura sosegada.

Según se recoge en el estudio y con datos comparados del 2014, España sigue siendo el país europeo con mayor número de librerías y el tercero, tras Gracia y Chipre, en lo referente al ratio de número de librerías por 100.000 habitantes.

Algo no parece cuadrar.

Los medios de comunicación se han hecho eco de los informes presentados con puntos de vista muy distintos unos de otros.

  • Peio H. Riaño sitúa a las librerías pequeñas de barrio al borde del cierre.
  • El ABC señala que las mismas, las pequeñas, tienen menos beneficios.
  • Karina Sáizn Borgo en Vozpópuli, parece ver el vaso medio lleno y marca, aunque ralentizada, una tendencia positiva.
  • Infolibre incide en la necesidad del precio fijo para los libros de texto.
  • El Cultural apunta al lado gastronómico con matices de canibalismo. «Las grandes se comen a las pequeñas».
  • 20 minutos nos dice que el número de librerías crece. Quizás no ha visto este gráfico.

  • La Vanguardia aunque hable de crecimiento hace incidencia en la crisis que siguen sufriendo.
  • El País da una cifra que, en mi opinión, explica muchas cosas: la mitad de las librerías independientes factura menos de 90.000 euros al año. Os invito a dar un vistazo a ‘la cuenta de la vieja‘ para una librería.

En los primeros mapas, año 2000, no se tenía de hecho en cuenta a las librerías con facturaciones inferiores a 150.000 euros por considerarlas difícilmente viables como empresas.

Tiempo habrá de analizar más en detalle los tres informes presentados.

En cualquier caso, y es otro punto de vista interesante, el aumento del número de librerías no parece generar más empleo como señalan en Cuatro ojos magacín.

Pero, un primer vistazo, vuelve a hacer surgir la pregunta ¿quién le va a poner el cascabel al gato?

Llibreria Macondo abre hoy en Sabadell

Hoy a las 18:30 hará su puesta de largo en Sabadell una nueva librería. Librería Macondo.

El mismo día en el que se presentan los últimos datos por parte de CEGAL sobre las librerías españolas nace una nueva librería como pretendiendo desafiar a la tozuda realidad de la disminución de las ventas si se miran con una cierta distancia en años.

Por qué Macondo.

Nos lo explican en su facebook:

«Macondo fue el lugar de lo imposible, el lugar de todas las cosas, de los santos y los demonios, de la condena y la resurrección, del amor y el desamor, de la espera, de la locura, y de ser lugar pasó a ser adjetivo, saltándose de un solo brinco la opción de ser gentilicio. Y fue adjetivo sin calificativos, un poco como su creador. Se decía, se dijo y se dirá macondiano, y esa sola palabra entrañará magia, fulgor, luz, sombra, o en últimas, lo imposible: “Melquíades terminó de plasmar en sus placas todo lo que era plasmable en Macondo, y abandonó el laboratorio de daguerrotipia a los delirios de José Arcadio Buendía, quien había resuelto utilizarlo para obtener la prueba científica de la existencia de Dios”. Macondianos fueron los hombres y sus delirios. Macondianos fueron la lluvia sin fin y el sol opaco. Macondiano fue dios.

Y macondianos fueron los García Márquez, todos, y el amor, por ejemplo, porque en los calurosos tiempos guajiros, aun antes de que surgiera Macondo, cuando los padres de Gabriel José de la Concordia se enamoraron, el amor era locura, delirio, fantasía, frenesí. Eran amores macondianos, amores atrevidos»
Fernando Araújo Vélez

Desde aquí todo mi ánimo y cariño para esos ‘aparentes imposibles’ que en muchos casos acaban convirtiéndose en ricas y plurales miradas sobre la realidad y espacios para el encuentro, el disfrute y la lectura.

Audiolibros ¿se leen o no se leen? ¿quién ganará? ¿Spotify o Netflix?

Hace sólo cuatro años el audiolibro parecía no existir en España.

Es muy interesante lo que se podía leer entonces:

Según comentan Carmen Ospina, Iría Álvarez y Santos Palazzi, responsables de las áreas digitales de Penguin, Santillana y Planeta, respectivamente, en España no se hacen largos trayectos en coche que permitan ir escuchando un libro mientras conducen. “En EEUU tardan horas en llegar al trabajo por las largas distancias y eso hace que uno pueda ir escuchando tranquilamente un audiolibro”, confirma Palazzi. Con respecto al norte de Europa, el razonamiento tiene que ver con  las horas de luz. “Si ya desde el mediodía es de noche, tienen que ocupar su tiempo en algo mientras hacen otras tareas en casa”, añade este directivo.

El coste de producción: Crear un audiolibro no es barato. Necesitas uno o dos locutores como mínimo, un estudio de grabación, un técnico de sonido y un equipo para recrear los efectos especiales. “La hora de grabación cuesta unos mil euros, por lo que si un audiolibro sale a unas diez horas, tienes que gastarte 10.000 euros. Si luego lo vas a vender a cinco euros, los márgenes de beneficios no llegan”, sostiene Rafael Martínez. En Planeta ponen los costes en 30.000 euros por audiolibro.

A fecha de hoy es difícil saber todavía si existe comercialmente porque por ahora algunas de las empresas parecen moverse en modo pesca: Date de alta gratis durante 15 días. Déjame en cualquier caso una tarjeta de pago, a ver si al terminar los 15 días de prueba se te olvida y te calzo el primer cargo.

Confianza se le llama.

En Barbastro dicen que han dicho que esos costes ya son sólo de 3.000 euros que quien dijo ‘digo’ dice ahora ‘diego’.

Ahora resulta, ¡oh cómo hemos cambiado! que el formato audiobook, así le llaman, copará el 30% del mercado.

Viejunos del lugar, ¿os acordáis de las previsiones del libro electrónico?

Parece que lo más nuevo sustituye a lo nuevo y toca tangencialmente a lo que lleva más tiempo. No es pues innovación, sino fracaso de lo aparentemente emergente por haber dejado de lado probablemente la reflexión sobre lo que debe ocupar el centro del debate y la reflexión: el contenido, su valor y su adaptación y enriquecimiento a nuevas realidades y mediaciones.

Es tan escaso el discurso que para decir si se va a ser de ‘papá o de mamá’ hay que buscar la referencia fuera, en mercados como el del audiovisual y la música con lógicas muy distintas a la del libro que ya de por sí es compleja y diversa.

Así unos dicen que será el Spotify de los libros y otros el Netflix.

No está de más recordar que ya hace años hubo quienes utilizaron esas comparaciones y ahí siguen intentándolo…. Nubico, 24 Symbols son dos ejemplos.

De la misma manera es tan curiosa la situación que unos dicen que escuchar también es leer y otros que el audiolibro es para aquellos que les gustan los libros pero no leerlos. Todavía deberemos oír y escuchar muchos mensajes vacíos, contradictorios y de carácter exclusivamente comercial.

Todo ello parece situarnos más bien en un escenario de confrontación comercial al estilo Coca-Cola / Pepsi-Cola o McDonald’s / Burger King que en una reflexión seria sobre la creación y sus mediaciones.

O, si lo prefieren, y dicho de otra manera más cruda, por si les gusta poco hecha: es un buen camino para avanzar hacia el ‘contenido basura’.

Porque, a veces, el medio es el mensaje.

Escribió Zaid ya hace años:

El mundo artístico, literario, intelectual, no tiene economías de escala. Aunque es posible operar en gran escala, eso no reduce los costos ni aumenta la calidad…

Cuando se devalúan el amor al arte, el orgullo del oficio, el aplauso inteligente de los públicos pequeños, la cultura se seca. Los grandes creadores salen del mundo artesanal, no del gigantismo que los explota (Crítica del mundo cultural; El Colegio Nacional, pag. 364)

Quizás convenga tenerlo en cuenta.

 

 

La Inexplicable abre en Sants, Barcelona, este domingo

Este domingo, 19 de noviembre, va a abrir sus puertas una nueva librería en Barcelona. La Inexplicable.

Enhorabuena y todos los ánimos.

Creo, además, que es un buen momento para reconocer la influencia que en unas cuentas de las aperturas que se van produciendo por Catalunya tiene la Escola de Llibreria.

Gloria Arquillo y Anun Jiménez muñidoras de este nuevo proyecto librero se han formado en L’Escola.

¿Sus deseos?

Ser una librería con espíritu de ciudad, pero sobre todo vinculada al barrio de Sants. Queremos trabajar en red con otros actores del barrio (entidades, escuelas, bibliotecas, etc.). Apostamos por un catálogo de calidad y cuidadoso (hemos elegido cada libro!) Y sobre todo hacerlo en las secciones de novela gráfica y poesía. También queremos dar prioridad a las editoriales independientes y locales.

Podéis conocer un poco más sus intenciones y las de Sendak, que abrirá en diciembre, en esta entrada del blog de L’Escola.

¡Larga vida!

 

Somos mucho más que dos….

Mañana sería y será su cumpleaños.

Hoy le hemos reconocido lo vivido, lo querido, lo compartido.

Muchos y muchas.

Abrazos, lágrimas, sonrisas, silencio, respeto, cariño….

Quede para el recuerdo la canción que Loli, su pareja, ha escogido y el poema del propio Víctor con el que Loli, Gorka y Josune nos han invitado a seguir en la vida…

ES MÁS LA VIDA

Respirar desde dentro,
escuchar los sonidos
que me envuelven.

La vida es eso:
el correr de los niños,
sus gritos, el hablar pausado de los mayores.
su sabiduría tranquila.

La vida es eso:
mirar los ojos,
los rostros,
tocar las manos
sentir el amor, la violencia.

La vida es eso:
pero es más la vida.

(Víctor Urrutia; El libro de los días; pag. 84)

 

España. Comercio interior del libro. De 2006 a 2016. Algunas reflexiones. 9. Qué venden las cadenas de librerías

El comportamiento en la venta de libros de las cadenas de librerías tiene, aparentemente, poco que ver en su conjunto con lo que venden las librerías independientes en lo que hace referencia al peso de las materias en su particular ‘cesta de la compra’.

Las cadenas de librerías son el segundo canal de comercialización. El primero siguen siendo las librerías que decrecen en su peso y el segundo las cadenas que aumenta ligeramente su peso.

Ambos, en cualquier caso, facturan menos a precios corrientes y a precios constantes que hace 10 años. Los datos sobre la evolución de las librerías ya los presentamos en su momento.

La evolución de la facturación de las cadenas es la siguiente:

En los grandes número, algunas notas que quizás sean interesantes o deban ser tenidas en cuenta:

  1. La evolución del peso del texto no-universitario que aumenta casi en 14 puntos.
  2. La evolución del peso también de la literatura infantil-juvenil en 6 puntos porcentuales.
  3. El mayor peso que en las librerías, como vamos a ver a continuación de la literatura que aún habiendo descendido supone el 30%, mientras que en las librerías supone sólo el 19,64%.

Comportamientos y modelos de negocio, por lo tanto distintos. Podríamos afirmar con una cierta intención provocadora que en los ‘grandes números’ las cadenas de librerías son más literarias que las librerías independientes ya que en las primeras el peso de la literatura incluida la infantil-juvenil supone un 46,32% de la ‘cesta de la compra’ y en las librerías es sólo el 33,49%.

Ferias del libro y cuenta de la vieja

Las ‘cuentas de la vieja’ fruto de la sabiduría popular y del practicismo suelen servir para ayudar a poner blanco sobre negro o poner en claro sin muchas complicaciones los números básicos de una actividad.

Por aquí he presentado ya las cuentas de la vieja para una librería y también hice en su momento las de la Feria del libro de Madrid pensando en lo rentable que podía ser o no para quien asistiera a la misma.

Recientemente, del 27 de octubre al 5 de noviembre, se  ha celebrado en Madrid una Feria del libro de otoño, coincidiendo con el cuarto centenario de la Plaza Mayor. La feria ha sido organizada por la Asociación de Editores y el Gremio de Libreros de Madrid.

Desconozco si se volverá a celebrar.

Los organizadores de la misma, han facilitado algunos datos sobre la misma que resumo a continuación:

  • 150.000 asistentes
  • 14.400 ejemplares vendidos
  • 240.000 euros de venta
  • 60 stands

Algunos datos aproximados que podemos calcular:

  • El precio medio del libro vendido ha rondado los 18,50 euros que aplicado el 10% de descuento nos da el precio aproximado de 16,6.
  • Como mucho han comprado ejemplares el 9,6% de los asistentes a la feria.
  • La facturación media por caseta ha sido de 4.000 euros.
  • El margen bruto que una caseta ha podido conseguir, suponiendo que los distribuidores hayan sido generosos y les hayan concedido un 35% de descuento al que habría que restar el 10% que aplican al comprador habrá rondado el 25%.
  • Dicho descuento, ahora empezamos la cuenta de la vieja, dejaría a cada caseta 1.000 euros.
  • Con esos 1.000 euros habría que hacer frente, por lo menos, a tres costes:
    • El pago del alquiler de la caseta: 350 euros más IVA que pagaba el librero. Nos olvidamos incluso de lo que tuvieron que abonar los editores.
    • La imputación correspondiente de gastos de personal. 10 días de feria y calculemos como mínimo un día más para montar y otro para desmontar son 12 días.  Si seguimos las cuentas de salario que propusimos para la librería y los prorrateamos por el número de días, nos situaría el sueldo más la Seguridad social correspondiente en torno a los 1.000 euros.
    • Gastos de transporte para el movimiento de libros. 100 euros.

Conclusión: es difícil que las cuentas salgan con esas ventas.

 

Hasta pronto amigo Víctor

Amiga Josune. Ahora toca terminar la obra. Un beso muy especial para ti.

Ayer a la noche escribí el silencio.

No tenía más palabras.

Sabíamos que iba a llegar. Estaba ahí, esperando a la vuelta de la esquina más inesperada, pero estaba. La muerte como compañera no querida, pero con la que te sabes que te vas a topar.

Fue ayer a la noche.

Escribí en facebook:

Hoy ha sido una tarde rara.
Quizás esperada o sabiendo que iba a llegar.
Ahora, ya cuando ya ha entrado la noche sólo queda el silencio…

Hoy, al levantarme, leo palabras de buena gente, de amigas y amigos que reconfortan y comparto.

Fernando Fantova:

Una comprensión mínimamente cabal del devenir de nuestra vida individual nos hace conscientes de hasta qué punto nuestras supuestas trayectorias y logros son posibles gracias a las trayectorias y logros de personas que nos abrieron caminos, a cuyos hombros nos encaramamos o con las que compartimos proyectos. Por eso hoy se debe hablar aquí de Víctor Urrutia Abaigar.

Pedro Ugarte:

Ha muerto hoy Víctor Urrutia, sociólogo, profesor de la UPV/EHU, escritor. Tuve la suerte de trabajar con él a lo largo de cuatro años. Por tarde que me fuera del Rectorado, la luz de su despacho seguía siempre encendida. Llevó escolta muchos años, para vergüenza de mi país. Era un hombre de palabra llana y con muchas más razones para llamarse cristiano que algunos amanerados estetas como yo. 

Teresa:

Te nos has ido. Te has escapado entre los dedos de nuestras manos. Apenas hace un rato y me cuesta hablarte en pasado. Me cuesta incluso escribirlo. Pero es un pequeño homenaje que quiero brindarte. Te lo debo.

Pedro Ontoso en El Correo:

En realidad hablábamos de muchas cosas cuando compartíamos mantel y escoltas en los tiempos de persecución de ETA, cuando la falta de piedad esclerotizaba a una sociedad vasca narcotizada. Como director de tesis hemos compartido muchas horas de reflexión sobre la violencia política, el terrorismo, el papel de la Iglesia y de los partidos políticos. Como sociólogo ha dedicado muchos años a tratar de entender cómo funcionan las sociedades, a descubrir sus grandes problemas, a realizar un diagnóstico acertado y a proponer políticas y soluciones. A Víctor le dolía la sociedad vasca que miraba para otro lado, la «quiebra moral».

Eva Díaz Tezanos:

Era un apasionado de Cantabria. En su refugio de Ucieda paseó cada rincón de nuestra querida Cantabria. Conocía cada collado, cada valle, cada río, cada uno de esos espacios mágicos que conforman nuestra región y que siempre se entrelazaban entre nuestras conversaciones sobre actualidad política. Siempre accesible a todos y cada uno de nosotros fue bálsamo para nuestros miedos y alimento para inquietudes.

Andoni Unzalu:

A mí me sorprendió su faceta religiosa. Un creyente raro que defendía su fe desde una posición estrictamente de libertad personal sin intentar hacer proselitismo alguno. A veces yo le tomaba el pelo y le preguntaba cómo una persona racional y culta como él podía seguir creyendo en los mitos. Nunca se enfadó ni intentó rebatirme.
Él era creyente porque era libre para serlo, y punto.

Pello Salaburu:

Para mí era, por encima de todo, un amigo y una buena persona. Generosa, abierta, humilde en sus comentarios. Cercana. Sabía, esto es cada día más raro, callar y escuchar.

Víctor_Pello_salaburu

Idoia Mendía:

Un socialista íntegro, pero sobre todo un buen hombre.

Javier Elzo:

Yo veo en Víctor un prototipo del ideal, de la esperanza que me hago del hombre (y de la mujer) del nuevo siglo: que ponga los Derechos Humanos por delante de las legítimas y diversas opciones políticas, religiosas, sociales, culturales etc. Vivimos en un mundo multicultural, multiétnico, en una sociedad plural.

ABC

El Correo.

Irala 100 urte.

Recordamos hoy a nuestro amigo, el sociólogo y profesor universitario Victor Urrutia fallecido ayer. Lo hacemos agradeciendo su imprescindible aportación para el conocimiento de la historia de nuestro barrio y su infatigable disposición para difundirla. El pasado 15 de noviembre de 2016 nos ofrecía una de sus memorables charlas bajo el título «Iralabarri, pionero del urbanismo social en Bilbao»

PSE-EE

Recuerdo un viaje compartido en coche a Madrid hace años, muchos años cuando ambos andábamos trabajando allí. Salimos en coche, tras enseñarle el quiosco que más pronto abría a las mañanas en Bilbao y que sigue siendo de los primeros en levantar la persiana. Conversar y disfrutar del viaje para siempre poder volver a hilar en el siguiente encuentro.

En uno de los últimos que tuvimos él seguía queriendo captar la vida para seguir disfrutándola.

Hasta la vista amigo.

Loli, Gorka, Josune… ¡Abrazos!

 

Hoy 10 de Noviembre Día de las Librerías

Hoy 10 de noviembre se celebra la séptima edición del Día de las librerías que organiza CEGAL en colaboración con el Ministeriro de Educación, Cultura y Deporte.

Juancho Pons, presidente de CEGAL creo que ha estado muy acertado, en mi opinión, al resaltar que lo que se desea sobre todo es que sea una fiesta de celebración con los lectores.

Sin ellos, no se es nada.

Aprovecharé pues para incluir mi ‘cuña publicitaria’ y plantear de nuevo la propuesta de hablar de ‘lectorerías‘.

Comparto la visión de Luismi Cencerrado de situarlas como referentes culturales modernos y activos.

Hoy intentaré sacar un rato para acercarme a una de mis librerías de cabecera para celebrarlo con ella y agradecerle que siga como muchas otras contra viento y marea ofreciendo un espacio que ayuda en muchas ocasiones a romper la monotonía urbana.

En los últimos tiempos ha habido unos cuantos ‘locos bajitos’ que se han animado a abrir nuevas lectorerías.

Recientemente Santi Eraso escribía un artículo en el que decía:

La primera iniciativa (refiriéndose a Tobacco days) se suma a la larga tradición de librerías con arraigo social (en este caso heredera de la desaparecida Garoa, que afortunadamente sigue manteniendo su tradicional espacio en Zarautz), como Hontza o Lagun -sirva esta mención para recordar a su fundadora María Teresa Castells, recientemente fallecida-; o Kaxilda, de más reciente creación, original lugar de encuentro, donde leer, conversar o compartir una buena mesa, se hace a la vez que se piensa la vida en común. Todas ellas, junto a otras que sería largo de mencionar, forman parte de ese entramado de pequeñas empresas que constituye el músculo de una ciudad cohesionada con fuertes lazos comunitarios. Esa ciudad de «los caminos cortos» de la que nos habla Felipe Delmont, arquitecto-urbanista y consultor de UNESCO, compacta, densa e intensa, que promueve la posibilidad del trabajo, el encuentro, el recreo y el reposo en todas sus partes, como antagonista de la suburbial, segregada y diluida que individualiza y privatiza la experiencia y nos convierte en meros y resignados consumidores.

Sigamos pues tejiendo entre todas las rutas de los caminos cortos.

¡Feliz día lectoras y librerías!

 

España. Comercio interior del libro. De 2006 a 2016. Algunas reflexiones. 8. Qué venden las librerías

Interesante y ¿preocupante? la evolución de las ventas en librerías y el peso de las materias que venden.

Partiendo de los datos de facturación por materias y atendiendo a los porcentajes he construido una tabla que incluye la facturación entre 2006 y 2016 de las librerías y de las materias.

Con los datos globales en la mano podríamos lanzar un titular para llamar la atención que podría ser, por ejemplo: Las librerías son cada vez menos culturales y más de educación obligatoria.

La facturación se refleja a precios corrientes. Ya vimos con anterioridad que las librerías han sido y siguen siendo el principal canal de facturación, pero, también podemos comprobar que ha ido variando en parte el peso de las materias que generan esa facturación.

Vemos también, esto es una tónica general, el descenso global de la facturación.

Me llama mucho la atención el aumento del peso porcentual de las ventas de Texto No-Universitario que, no lo olvidemos, es un libro que se ‘expende’ y que no supone por parte del librero ninguna decisión de compra.

 

No me resisto a añadir una reflexión de Zaid sobre lo significativo que esto puede ser.

La animación de las librerías no la hacen los libros escolares, sino las novedades literarias, intelectuales, políticas. Los libros de texto, por definición, expresan la cultura obligatoria que se transmite de arriba hacia abajo: de los que saben a los que deben aprender. Los otros libros expresan la cultura libre, abierta, sin credenciales ni horarios, que no educa desde arriba y por obligación, sino entre iguales y por gusto, desde la plática sabrosa entre lectores que se animan leyendo y se platican unos a otros las maravillas o decepciones que han encontrado. (Gabriel Zaid; Crítica del mundo cultural; El Colegio Nacional, pag. 118)

Sé que hay muchas librerías que no venden texto. Sé que muchas de las nuevas librerías que abren plantean sus proyectos lejos del mismo, pero, al mismo tiempo, los números dicen lo que dicen… y el dinero genera, también, discurso.

España. Comercio interior del libro. De 2006 a 2016. Algunas reflexiones. 7. Facturación por materias

Los grandes números pueden ser, en parte, tramposos. Pueden velar la realidad o puede que nos den una información, un dato, que puesta en perspectiva llegue a resultar vacío.

Cuando pasamos a mirar un poco más en detalle las tripas, desglosamos las cifras, les damos un poco de profundidad es cuando quizás nos empiezan a hablar con un poco más de claridad.

Ya hemos analizado con anterioridad la evolución global de la facturación y ya vimos que no era para echar cohetes.

Ahora bien, que la facturación global disminuya no quiere decir que esta sea la tónica de todas las materias. De hecho, como veremos a continuación, hay materias, y por lo tanto editoriales, a las que parece que la aparente crisis no les ha sentado tan mal. Es cierto que los datos que presento son a precios corrientes. Si tuviéramos en cuenta el IPC entre 2006 y 2016(16,5%), el libro de texto sería la única materia que se mantendría en cifras parecidas de facturación. Dicho de otra manera: su crecimiento sería equivalente al IPC.

Esas variaciones de facturación por materias hace que ‘la cesta de la compra de libros’ haya cambiado de manera importante en su composición interna en su porcentaje de composición. En la evolución de estos 10 años hay un claro ganador que es el libro de texto no universitario y un ganador menor, el infantil-juvenil. El resto pierden.

Para entenderlo con un ejemplo de otro sector sería como pensar que en el sector de la gastronomía los únicos que ganan son las empresas que dan comida en los colegios y pierden los que hacen una restauración más creativa y arriesgada. Aquí, pasa algo parecido.

La primera tabla presenta la evolución de la facturación a precios corrientes y el porcentaje que supone cada materia en el año.

En la segunda señalo simplemente el cambio de peso porcentual que ha tenido cada materia entre el 2006 y el 2016 y la diferencia de facturación de la misma entre esos dos años.

 

 

España. Comercio interior del libro. De 2006 a 2016. Algunas reflexiones. 6. Devolución de libros

Ya dejó escrito Gabriel Zaid que «el mayor costo de un libro es el costo de equivocarse» (Los demasiados libros; Anagrama, pag. 104).

Y si entendemos la devolución como una equivocación del editor en la medida en que el resultado inicial de su acción de editar es un ejemplar que no ha sido ni comprado ni leído, tendremos que concluir que el sector, entendido en su conjunto, parece no haber aprendido nada a lo largo de este siglo de sus equivocaciones ya que el porcentaje de devoluciones es superior en siete puntos porcentuales al del 2001.

No parece pues que algunas nuevas posibilidades como puede ser la impresión bajo demanda cale, según estos datos, en el conjunto del sector.

Cierto es también que la necesidad, lo digo pensando en las editoriales de menor facturación, parece obligar a tomarse las cosas más en serio y aunque ellas también tienen porcentajes superiores a los del año 2001 han iniciado ya hace tiempo un largo viaje de vuelta desde cifras que en su momento, año 2007, rondaron el 48,5% o, lo que es lo mismo, la mitad de la producción, al 19% actual.

No está de más recordar algunas reflexiones sobre las devoluciones:

El derecho a la devolucióndel sobrante que debiera ser uno de los grandes aliados de toda librería se está tornando, cada vez más, en un enemigo que, como un niño mal criado, nos extorsiona sin que seamos conscientes de ello. Los costes derivados de la gestión de devoluciones están perjudicando notablemente nuestra cuenta de resultados. Nuestro objetivo, el objetivo de todos a corto y medio plazo tiene que pasar por ser capaces de reducir nuestros índices de devolución. En la actualidad, los principales beneficiados con el derecho a la devolución están siendo las agencias de transporte. Y esto no deja de ser un enorme disparate. Es urgente dar una solución a este problema. (Juan José Ginés; UIMP; 11/07/2007)

Si hay algo que caracterice la situación actual del sector es el exceso de producción editorial. Es este uno de los eternos debates de este gremio de la abundancia. Todos somos conscientes de que estamos ante un mal endémico que nos está atenazando y que empieza a tomar tintes dramáticos. La hiperinflación de novedades está generando desorientación en un punto de venta que es incapaz de distinguir entre grano y paja. Además genera desorientación en el lector que no es capaz de asimilar la enorme cantidad de información que recibe. Y bien es sabido que la desorientación no es buena consejera.(Juan José Ginés; UIMP; 11/07/2007)

Jesús Badenes consideró ya en el año 2005 a las devoluciones como la mejor medida del fracaso de la industria editorial.

Parece que se sigue en muchas ocasiones predicando en el desierto.

 

Paula Jarrín de Llibrería Al·lots en Barcelona. La librera que puede vivir mil vidas cada vez que abre un libro

Me llamo Paula Jarrin.

Trabajo en la Llibrería Al·lots, una pequeña librería especializada en literatura infantil y juvenil situado en Barcelona que viene funcionando desde el año 1996 pero que desde el 2012 ha pasado a mis manos y a mi alma después de un traspaso.

La idea de luchar por ese traspaso comercial aquí vino motivada por las ganas de luchar y de salir adelante. Con mi compañero estábamos atravesando una situación económica muy delicada y los dos veníamos trabajando hacía 8 años en el mundo de libro, él en una librería general pero se encontraba en el paro y yo en el mundo editorial como lectora, correctora freelance y el volumen de trabajo empezaba a bajar estrepitosamente. Nos armamos de valor, pedimos un crédito y nos arremangamos para trabajar por el fomento de libro y de la lectura y para hacer de nuestra librería un pequeño centro de cultura y de difusión de la LIJ.

Considero que mi apuesta profesional es arriesgada y valiente y se caracteriza fundamentalmente por una atención personalizada, tiempo, profesionalidad, búsqueda de libros y también colaboración con diferentes entidades como bibliotecas, centros de recursos pedagógicos en sintonía con el fomento del libro y de la lectura.

Me gusta  porque puedo vivir mil vidas cada vez que abro un libro. Mi pasión es la lectura, y poder recomendar libros y ver cuando un pequeño lector vuelve porque le gustó ese libro que recomendaste es un regalo de la vida.

Cuando tenía doce años quería ser arqueóloga.

Cuando me toca explicarle a una persona que no conozco por qué me gusta mi oficio le digo que nace de la pasión de leer y del reto de sobrevivir de los libros. Y de la preciosa gente que el mundo del libro me pone en el camino.

Más allá de las apariencias la realidad de mi día a día en el trabajo es así: ¡difícil! La parte administrativa de la librería es pesada, la parte financiera complicada y rebuscada, que uno trabaja más horas que un reloj, que muchas veces le robamos tiempo a la familia y al sueño y que estamos casi casi 24 horas de guardia. Pero ese momento en que abres el libro, te sumerges en él y piensas a quién se lo recomendarás, le gustará o planeas actividades y nuevos proyectos rocambolescos no tiene precio.

Lo más raro que me ha sucedido nunca en el mismo ha sido cuando una persona que entro en la librería me pidió si además de venderle un libro le podía hacer un pastel de aniversario para su hijo.

Y lo peor: esos primeros meses en que no sabías si podrías abrir al día siguiente.

La imagen que tienen las personas sobre el trabajo que realizo creo que se caracteriza por estar todo el día leyendo (y no es así, lástima!!)

He perdido el entusiasmo por lo que hago cuando programo una actividad y no viene nadie, cuando la burocracia política del sistema deja de lado a los pequeños establecimientos de radio y beneficia a los grandes grupos.

Sin embargo, lo mejor de mi trabajo, sin duda, es el contacto con los pequeños lectores, en clubs de lectura, en las actividades, ese momento en que vas leyendo con ellos en voz alta y ves como se quedan enganchados en ese río de letras que fluye.

El mejor día que recuerdo en el trabajo fue cuando después de un fin de semana con amigos pintando la librería, reabrimos y ¡todo se llenó de luz!

Cuando quiero tomarme un descanso me dedico a ir a la esquina de la librería a tomarme un affogato siempre bien acompañada de un libro.

Así es como veo el futuro de mi profesión: sin profesionalización no hay futuro. El futuro está saliendo de la librería a buscar lectores y trayéndoles de la mano a nuestra casa de palabras.

Seguir leyendo en Lasaiblog.

Noski Liburudenda abre en Rentería

Ayer inició su andadura en Rentería la nueva librería Noski.

Hoy a las 19:00 inauguran.

Como nos cuentan en el Diario Vasco Juan Manuel Uría y Sihara Nuño se encuentran detrás de esta iniciativa que, «siempre con el libro como eje», desarrollará otras actividades multidisciplinares, como exposiciones de pintura, escultura, artesanía y joyería.

Quieren que su espacio, sea un espacio de creación.

Contarán con entre 3.000 y 4.000 referencias en los sesenta metros cuadrados, entre libros nuevos, de segunda mano y de artista, con especial protagonismo para la narrativa de editoriales independientes, el ensayo y la poesía, «dada nuestra condición de poetas»

Desde aquí, os deseo ¡larga vida! y espero pasarme antes de que este año 2017, en el que han abierto un buen puñado de librerías, termine.

Todavía, en lo que queda de año, abrirá alguna más…

 

¿El novedoso sistema de la lectura por suscripción?

La aparente modernidad nos va saturando de mensajes nuevos, aparentemente, y también contradictorios.

Se nos dice que escuchar es leer, que las nuevas tecnologías nos permiten ahora que leamos todo lo que queramos con un sistema de suscripción de pago fijo mensual. No siempre querer es poder.

Nos dicen también que ahora leamos con la oreja porque con el estress de estos tiempos no hay tiempo para nada, ni siquiera para leer que al igual que para escuchar buena música requieren tiempo y cierta lentitud.

Gabriel Zaid ya puso en valor el tiempo del lector cuando escribió:

El costo de leer se reduciría muchísimo si los autores y los editores respetaran más el tiempo del lector. Si no se publicaran los textos que tienen poco que decir, o están mal escritos, o mal editados. (Crítica del mundo cultural, pag. 58)

Volvamos a la reinvención de la rueda y los novísimos modelos de pago único y lea usted lo que le plazca.

Hoy me he encontrado en El Correo una noticia referida a la Librería Goya de Bilbao que cumple 75 años y que ¡oh curiosidad! tuvo sus orígenes en el año 42 precisamente con un modelo de suscripción mensual.

Dice la noticia:

Los orígenes de Goya nada tuvieron que ver con la papelería, los lienzos y los lápices. «Nació como un pequeño negocio de alquiler de libros», cuenta Alejandro. «Lo fundó en 1942 nuestro abuelo, Jesús Prieto, que era funcionario y no tenía una gran vocación empresarial». En realidad lo concibió como un servicio. «Se llamaba Biblioteca Circulante troya», detalla Susana, «Los clientes pagaban siete pesetas al mes y podían leer todos los libros que quisieran».

La idea era interesante, pero económicamente no muy viable. Pasados quince años, las pérdidas habían alcanzado las 40.000 pesetas.

Hoy que leo en los medios la afirmación un tanto a la ligera de que el audiolibro de aquí a cinco años supondrá un 30% del mercado, prefiero echar la vista atrás para comprobar que algunos no aciertan nunca.

Quizás dentro de cinco años o de 10 haya que decir también…

La idea era interesante, pero económicamente no muy viable.

Para algunos, en cualquier caso, nada cambiará.

Abrirán un nuevo circo.