Los datos , los números enteros, los porcentajes, las fuentes, las comparaciones…
El error está en entender el dato como un fin en sí mismo y no como un elemento que contribuye a generar un conocimiento que previamente no existía o no estaba explicitado. (Álvaro Fierro, Andoni Garaizar, Andoni Lastra & Aitzol Batiz en Revista Texturas 32; Trama editorial, pag. 44)
En el mundo del libro cada vez se parecen más a prospectivas electorales. ¿Quién gana, quién pierde? ¿Qué presento? ¿El crecimiento porcentual?, ¿los datos absolutos? ¿con quién comparo? Si este soporte crece… ¿quién baja? ¿qué mido? ¿quién me da los datos?…
Ahora parece que sólo existe el crecimiento del audiolibro. Hace unos años, pocos parecía que reinaba el eBook… A rey muerto, rey puesto, pero… siempre, por ahora, en los márgenes de algún sistema. Porque lo de Amazon es otra historia que se presenta en modo monarquía absolutista. Mientras tanto… el papel parece seguir limpiando la honra.
- De los 140 millones de crecimiento, 109,7, el 78% es en papel.
- El papel es el soporte que más crece.
- Si el papel crece, el audiolibro canibaliza al ebook y su peso conjunto es menor en 2018 que en 2017.
Los datos de la AAP resumidos, en evolución del primer cuatrimestre comparado entre 2017 y 2018 vienen a decir esto en números y en porcentajes de presencia en mercado por soportes.
En cualquier caso la pérdida de centralidad de la lectura leída, mirada, palpada, susurrada, ¿escuchada?… sigue su camino hacia los márgenes del negocio del entretenimiento.